Una gran decepción y un total aburrimiento.
El libro lo empecé con muchas ganas,
después de escuchar en la radio unas críticas muy positivas en la
que lo ensalzaban por ofrecer divertidas críticas a la sociedad
inglesa de la época y jugar con todos sus tópicos y costumbres.
Pero a las pocas páginas volví a comprobar que las finas ironías
que parodian la sociedad no son lo mío.
Me ha costado horrores acabarlo, lo leí
a vista rápida y sin ningún interés.
Flora Poste es una chica que a sus
veinte años acaba de quedar huérfana. Sus padres, que mueren de
gripe, son unos desconocidos para ella ya que siempre estaban
viajando y sólo los ha visto unos pocos días en los últimos años.
Sus padres la han dejado en una
malísima situación económica y como ella no tiene ninguna
intención de ganarse la vida trabajando o de casarse, no tiene más
remedio que buscar entre sus parientes algunos con los que irse a
vivir y que la mantengan.
Los elegidos son unos primos de su
padre propietarios de una destartalada granja en Sussex, llamada
“Cold Comfort” y hasta allí se va para conocer a Amos
Starkadder, Judith, Reuben, Seth, Adam...
Unos parientes de lo más peculiares
que ella, con su férrea voluntad y su “educación cara, deportiva
y larga” se encargará de ir civilizando y organizando sus vidas a
su gusto. Para ello tendrá dos libros de cabecera en los que se
inspirará, “Los Pensées” y “El sentido común de índole
superior. Pensamientos para fortalecer el espíritu contra las
molestias e incomodidades propias de la vida diaria” escritos por
el Abad Fausse-Maigre.
No he sido capaz de disfrutar, ni
siquiera un poquito, con esta burla social. Una pena.