lunes, 19 de mayo de 2014

El juego de Ripper de Isabel Allende



- Yo no creo en Dios
- Yo tampoco, pero confío en el poder superior del amor, el amor que puedo dar y el que recibo






Sinopsis

Tal como predijo la astróloga más reputada de San Francisco, una oleada de crímenes comienza a sacudir la ciudad. En la investigación sobre los asesinatos, el inspector Bob Martín recibirá la ayuda inesperada de un grupo de internautas especializados en juegos de rol, Ripper.

"Mi madre todavía está viva, pero la matará el Viernes Santo a medianoche", le advirtió Amanda Martín al inspector jefe y éste no lo puso en duda, porque la chica había dado pruebas de saber más que él y todos sus colegas del Departamento de Homicidios. La mujer estaba cautiva en algún punto de los dieciocho mil kilómetros cuadrados de la bahía de San Francisco, tenían pocas horas para encontrarla con vida y él no sabía por dónde empezar a buscarla. 


Opinión personal

 
Una novela muy amena y que no defrauda.

Indiana Jackson, de 32 años, es una explosiva sanadora que trabaja en una clínica de terapias naturales. Es generosa, despistada y siempre está pendiente de los demás.

Su hija, Amanda, de 17 años, participa en un juego online de rol, llamado Ripper. Junto a sus compañeros intenta buscar pistas y resolver casos de asesinatos reales. El juego se convierte en algo más peligroso cuando comienza una oleada de crímenes en San Francisco y sus deducciones ayudarán en la investigación al Jefe del Departamento de Homicidios, Bob Martín.


La última novela de mi adorada Isabel Allende no alcanza los niveles de maestría a los que nos tiene acostumbrados pero es un libro muy entretenido con el que se disfruta de su escritura, su forma de ver la vida y la calidez que transmiten sus personajes.

Es un libro muy coral ya que hay bastantes personajes (Ryan Miller, Bob Martin, Atila, Alan Keller, Doña Encarnación, Celeste, Blake Jackson, los jugadores de Ripper...). De cada uno de ellos conoceremos una gran variedad de detalles, casi mini novelas. La facilidad de la autora para saltar de un personajes a otro, de una situación a otra, entrelazando sus vidas, ubicándote en la trama sin que te pierdas ni un sólo detalle es admirable. Sus descripciones son tan geniales que puedes imaginar perfectamente a los personajes e incluso oler los aceites esenciales de Indiana.

Como siempre hay temas que nos encontramos en sus novelas: el vacío de la soledad, el aislamiento de algunos personajes, el poder redentor del amor, personajes de varias generaciones (abuelos, nietos, hijos...), familias desestructuradas...

Creo que la editorial ha hecho una publicidad engañosa del libro al venderla como una “novela negra de acción trepidante” ya que aunque haya una investigación, asesinatos, juegos de rol, adolescentes inadaptados que se reúnen on line... todo esto ocupa un segundo plano y puede crear un expectación equivocada. Incluso la portada española es engañosa, nos da entender una novela oscura y lúgubre. Nada más lejos de la realidad.

La trama de suspense no es demasiado intensa y cojea descaradamente en el final. El asesino es fácil de encontrar porque todos los personajes son tan brillantes, fuertes y disfrutones de sus circunstancias (por malas que sean) que el único protagonista opaco y triste destaca en sus páginas. Además, la trampa para cuadrar toda la historia no ha terminado de convencerme. Me puedo creer que Indiana vivía en su mundo y no le daba importancia a cierto detalles pero que una masajista profesional y tan intuitiva no se de cuenta de algunas cosas...


En definitiva, me ha parecido una buena novela, muy entretenida, con personajes bien construidos, muy visuales, cargados de sentimiento. Escrita con una prosa cálida, llena de ironía y capaz de transmitirnos toda clase de sensaciones.


Lo peor:

- el final: repetitivo y un asesino cogido con pinzas.

- el epílogo: tengo que revisar mi concepto de romanticismo

- la sinopsis de la novela promete algo que no cumple



 

Billie de Anna Gavalda




Sinopsis
 
Es de noche y, mientras Franck duerme, Billie le cuenta a una estrella la historia de su amistad. Billie es una niña solitaria y conflictiva. Vive en una caravana rodeada de basura; su madre la abandonó cuando sólo tenía un año, y su padre y su madrastra nun ca fueron para ella una verdadera familia. Franck, en cambio, tiene una familia de lo más convencional. 

El destino junta a estos dos improbables compañeros de vida: la maestra les obliga a preparar durante las vacaciones de semana santa una escena de teatro de Con el amor no se juega, de Alfred de Musset. Se convierten entonces en amigos inseparables. 

Pero cuando termina la escuela, sus orígenes familiares los llevan por caminos distintos. Billie se queda en el pueblo y Franck se muda a París a estudiar derecho. Hasta que el destino vuelve a unir a estas dos almas gemelas, esta vez para siempre 


Opinión personal

Un libro decepcionante.

Me imagino que los lectores que se acerquen a esta autora, por primera vez, con esta novela quizás puedan sacar algo de él, pero mí que después de leer las maravillosas “Juntos, nada más” y “Quisiera que alguien me esperara en algún lugar” y las entretenidas “La amaba”, “El consuelo” o “La sal de la vida” me ha dejado fría y un poco triste por el bajón de sus dos últimos libros.

Quizás la culpa sea mía por acercarme a sus libros siempre con las expectativas demasiado altas y, claro, la decepción es mayor.

Quizás la autora haya querido jugar intencionadamente con los lectores, despistándonos, llevándonos de una situación a otra, no permitiendo que nos acomodáramos en el argumento para tenernos en la cuerda floja y hacernos sentir los miedos de los protagonistas, su vulnerabilidad y su lucha por mejorar cuando lo tienen todo en contra.

Yo, por desgracia, no he podido conectar con esta forma de narrar. He echado en falta muchas cosas: la calidez y ternura de sus palabras, la elegancia de su prosa, la empatía con sus personajes, el sentimentalismo de sus relaciones...

La estructura es muy rara y demasiado compleja. Los saltos en el tiempo son confusos, he pasado la mitad del libro perdida sin saber de qué hablaba en ese momento.

El final me ha parecido una rendición de ambos, como si aceptaran que su vida, con sólo 24 años, no pudiera cambiar.


En definitiva, uno de esos libros que son más bonitos al contarlos, por el trasfondo de superación y desarraigo de los protagonistas, que al leerlos.

Lo mejor: la portada.


Entradas relacionadas

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...