“Uno puede decirle a la gente de dónde eres, quién eras y quién eres, pero nadie que no estuviera allí te conoce en realidad. Entre nosotras hay un entendimiento que no necesita palabras”.
“La historia de once mujeres y cuarenta años de amistad”. Esta frase de la portada del libro me llamó la atención, cuando lo hojeé y vi que estaba salpicado de fotos de las protagonistas y lleno de experiencias, despertó mi parte más cotilla y no pude resistirme.
Se trata de una historia real basada en la vida y en la profunda amistad de once mujeres de Ames, un pequeño pueblo de Iowa.
Los nombres de las chicas son: Karla, Kelly, Marilyn, Jane, Jenny, Karen, Cathy, Angela, Sally, Diana y Sheila. Nacieron durante los años 1962 o 1963, son muy distintas: unas más serias y tímidas, otras más descaradas y espontáneas, de difentes religiones, de familias con diferente nivel adquisitivo. Empezaron su amistad en la guardería o en los primeros años de colegio y se reforzó en los años de instituto, formando un grupo con tanta complicidad y entendimiento que despertaba las envidias de sus compañeros. Esta relación tan especial continuará, con mucha dificultad, en los momentos más ajetreados de su existencia como separarse para ir a la universidad, trabajos, vivir en diferentes estados, matrimonios, divorcios, enfermedades, pérdidas personales...
En la actualidad se reúnen una vez al año en la casa de alguna de ellas para compartir risas y lágrimas aunque están continuamente en contacto gracias al e-mail.
Me gusta mucho la forma en que el autor nos cuenta esta historia, nos las presenta una a una, dedica capítulos a la música o películas que les gustaban o a las experiencias que marcaron su vida. Además reseña varios estudios sobre cómo viven la amistad los hombres y cómo lo hacen las mujeres. Algunas reflexiones que hace:
“Las amistades entre mujeres se hacen cara a cara, mientras que entre hombre son hombro con hombro”.
“La sensación de aislamiento puede ser tan dañina como fumar, comer en exceso o beber demasiado alcohol en las mujeres que no tienen amigas íntimas con las que hablar”.
Al principio puede resultar algo liado pero una vez conoces a las chicas, la historia emociona, engancha y se convierte en uno de esos libros que te deja con un buen sabor de boda y llena de envidia sana. Fue elegido por la revista People como uno de los 10 mejores libros del año 2009 en Estados Unidos.
“Incluso en los momentos más tristes y dolorosos, la risa ha sido para ellos como un chaleco salvavidas, una promesa segura de que no se ahogarán”.
Una foto actual de estas chicas tan privilegiadas.