En dos de los últimos libros que he leído se menciona a Madame Bovary, así que eso despertó mi cuirosidad.
En el libro de Pablo Tusset una de las protagonistas era conocida con el apodo de Madame Bovary porque no sabía si quería morirse o irse a París y en "Los confines" Clau también la nombra: "Nosotros no somos novela, sino película. En las novelas, las heroínas acaban mal: unas se suicidan con un veneno terrible..."
Además, Daniel Pennac en su libro “Como una novela” nos da los diez derechos imprescindibles del lector. El sexto es: "El derecho al bovarismo (enfermedad de transmisión textual)".
Para él "el bovarismo, grosso modo, es la satisfacción inmediata y exclusiva de nuestras sensaciones: la imaginación brota, los nervios se agitan, el corazón se acelera, la adrenalina sube, se producen identificaciones por doquier, y el cerebro confunde (momentáneamente) lo cotidiano con lo novelesco. Delicioso"
Aunque no sea muy correcto, ya que está considerada una de las mejores obras de la literatura y un canto a la libertad de la mujer, tengo que decir que no me ha gustado mucho.
Es una obra muy bien escrita, con grandes descripciones y lleno de detalles de la época pero la historia no consiguió engancharme.
Emma Bovary es una mujer vacía, superficial, avariciosa (hasta el extremo de arruinarse), incapaz de medir las consecuencias de sus actos, que confunde el lujo y el dinero con las delicadezas espirituales, incapaz de amar a nadie y creo que incapaz de sentir verdadero amor, ella ama a su manera, una forma obsesiva, agobiante, idealizada... es incapaz de aceptar los defectos del marido (al que aborrece), las rutinas de la vida cotidiana, el contacto con los hijos...
Vive en un mundo aparte, lleno de fantasías, pasión y éxtasis, obsesionada con el romanticismo. Para consiguir todo ésto, se echa varios amantes. Al principio, disfruta de lo prohibido de las relaciones pero después, tanto Rodolfo como León, se acaban cansando de ella.
Su marido, Charles Bovary, es un hombre que vivía para ella y que confiaba ciegamente en todo lo que ella hacía y opinaba y que cuando descubre sus infidelidades, una vez muerta, muere de pena al comprobar que ha vivido en una mentira.
Al ser un clásico hay que leerla y seguro que no deja indiferente a nadie, Madame Bovary es alguien a quien se odia o se ama.
