Este es el segundo libro que leo de Paul Auster. El primero fue “Brooklyn Follies” y me gustó mucho.
Esta novela también me ha gustado aunque el final me parece que está inacabado y que le falta algo.
Me encanta la forma que tiene de contar historias tan complejas de una manera tan clara y sencilla, y las descripciones de los personajes, a los que les tomas cariño por muy “tocados” que te parezcan.
Todos los personajes tienen alguna herida que deben superar y se reúnen en una vieja casa okupada en la que se ayudan e intentan superar sus miedos y renuncias afrontando la vida y sus problemas con valentía.
Al final parece que sólo les faltó un poco de tiempo para conseguirlo, o quizás, un poco de suerte.
"Los libros no son un lujo son una necesidad y la lectura es una adicción de la que no desea curarse"