Empiezo el año con una lectura emotiva, tierna y muy positiva que ha sido una gran sorpresa.
Me lancé a por este libro en cuanto vi su portada sin haber leído ni siquiera su argumento. Por eso, hasta el final no me enteré de que Bob y James Bowen eran famosos en Londres y había muchos vídeos de ellos en youtube.
La historia está basada en la historia real de los dos protagonistas.Voy a contar muy poco porque a mí me ha encantado ir descubriendo el relato poco a poco, sin tener referencias previas, y no quiero chafar ese placer a nadie.
James Bowen es un músico callejero en proceso de rehabilitación de su adicción a las drogas. Sobrevivie a duras penas aunque cuando encuentra un gato herido, Bob, en su portal decide llevarlo al veterinario y hacerse cargo de su curación.
No podía dejar de leer, la soledad de este chico te llega al alma, su generosidad con un animal abandonado es muy emotiva, la tranquilidad y mansedumbre del gato ha despertado mi envidia (mi gato en intratable), la conexión entre ellos es muy tierna y la fuerza y ganas de superación que Bob infunde a James hace que encuentre un nuevo aliciente en su vida, una tabla de salvación que le ofrece ese hermoso vínculo que se ha creado entre ellos..
El subtítulo de la portada dice "Cómo un hombre y su gato encontraron esperanza en las calles" y exactamente se trata de éso: esperanza y cariño.
