Sinopsis
Elena y Sergio forman una pareja unida,
pero la imposibilidad de ser padres hace aflorar la falta de amor
entre ellos y Sergio decide, después de veinte años de convivencia,
abandonar a Elena. Ella cae en una profunda depresión que tambalea
su vida en todos los aspectos. Pasa el tiempo y Elena recibe una
propuesta de un familiar lejano para alojar, durante su
convalecencia, a Lázaro, un tío abuelo que tiene que ser operado.
Elena no solo acoge en su casa a Lázaro, sino que, como tiene que
alquilarla para sobrevivir, también otros personajes llegan a la
casa con su visión sobre cómo vivir la tristeza o cómo huir de
ella: Sonsoles, una mujer mayor que debe vender su casa, llena de
libros y de recuerdos; Vanesa, una joven de treinta años que se
niega a crecer, porque el mundo de los adultos le resulta
terrorífico; Teresa, que entra en la historia para conseguirle una
gatita a Lázaro y que ya no se va, como una especie de hada urbana
que alivia del dolor cada una de las veces que aparece. O Cristian,
un viejo amigo que reaparece, un triunfador que oculta tantos
secretos como pecados.
Una historia que relata las heridas que
dejó la crisis; las maneras de sobrevivir, y cómo, frente a todo,
la fuerza del ser humano se impone; cómo el amor nos salva de muchas
cosas, y la vida nos enseña, siempre que se quiera aprender.
Opinión personal
No me ha gustado.
Es una novela muy corta pero trata
tantos temas y de forma tan superficial que no he llegado a conectar
con ningún personaje.
Se le podría haber sacado más partido
a la situación de personas normales que de repente pierden su
trabajo y sufren grandes cambios personales en su vida. A la
capacidad de adaptación, las soluciones que llegan de donde menos te
lo esperabas y, sobre todo, a las segundas oportunidades.