(Serie Sebastian Bergman, número 6)
Sinopsis
Los días de Sebastian Bergman en la
Unidad de Homicidios han terminado y ahora dedica su tiempo a
impartir conferencias y a escribir libros. Tras los acontecimientos
vividos en Castigos justificados, lleva meses sin noticias de Vanja y
la única persona del equipo con quien tiene contacto esporádico es
Úrsula.
Vanja tampoco sigue en la Unidad: ahora
trabaja como investigadora criminal en Uppsala. Desde el mes pasado,
está investigando una serie de abusos a mujeres. Cuando una de las
víctimas muere, la Unidad de Homicidios pasará a encargarse del
caso y, muy pronto, también Sebastian Bergman.
Reunidos, el equipo debe dejar de lado
sus problemas y conflictos personales para atrapar al brutal asesino
que sigue atemorizando Uppsala. Todo se complica cuando las pistas
indican que las víctimas no han sido seleccionadas al azar. ¿Pero
cuál es la conexión entre ellas? ¿Y quién se está tomando tantas
molestias para que no se establezca dicha conexión?
Opinión
Muy bueno, he disfrutado mucho
leyéndolo.
Me ha gustado el equilibrio que
consiguen entre la vida de los personajes y su investigación
criminal.
Conocemos un poco más a los
protagonistas y algunos siguen dando sorpresas desagradables como
Billy, otros siguen igual de odiosos como Sebastian, Ursula da algo
de pena por lo perdida que está en su vida personal.
La investigación empieza bien, va
lenta pero sin estridencias aunque llega un punto en que se vuelve
bastante increíble. No es tan espectacular como en las anteriores,
ni tiene las americanadas de otras entregas pero está bien.
Lo peor: la resolución de los crímenes
me ha parecido extraña, sobre todo la forma en la que se llevaron a
cabo estos ataques.
