Serie Inspector Martin Beck, número 1
La serie del inspector Martin Beck es
una de las más recomendadas por los aficionados al género. Está
formada por diez libros y el primer título se publicó en el año
1965.
Esta novela está bastante entretenida
y me ha hecho pasar un buen rato. Está contada a un ritmo muy
pausado pero con una buena dosificación de las pistas y novedades
que hacen que no pierda interés en ningún momento.
Martin Beck empezó a trabajar como
policía a los 21 años, a los 28 fue ascendido a subinspector
primero de la policía criminal de la policía estatal y está
considerado como el mejor interrogador del país.
Está casado con Inge, aunque su
matrimonio empieza a hacer aguas, y tiene dos hijos: Ingrid, de 12
años, y Rolf.
Durante el verano de 1965 aparece el
cuerpo de una joven en el lago sueco de Vettern. Después de tres
meses, el inspector Martin Beck apenas sabe que su nombre era
Roseanna, que vino de Lincoln, Nebraska, y que pudo haberla
estrangulado cualquiera de las ochenta y cinco personas que viajaban
con ella en barco.
A pesar de la falta de pistas no se dan
por vencidos, mantienen el caso abierto y no dudan en tirar de
cualquier pequeño hilo que ayude a su resolución.
Martin Beck y sus compañeros son
maravillosos detectives de libro: con una vida familiar complicada,
con un cierto “aroma de desamparo”, fumadores empedernidos,
ácidos y críticos en sus comentarios sobre la sociedad...
En el prólogo, Henning Mankell la
define como “una novela sencilla y clara, una historia
convincente”. Nada que añadir, aunque es curioso leer cómo se
hacían las cosas antes de la inmediatez del e-mail o del teléfono
móvil, algo de lo que ya casi ni nos acordamos.
Me ha sorprendido que en algunas
ocasiones sea políticamente incorrecta, como por ejemplo los
comentarios que Kollberg hace sobre el cadáver de la chica
asesinada. Normalmente, en las series, películas o libros los
asesinatos pueden ser espeluznantes pero los cuerpos de las víctimas
son tratados con un respeto reverencial.
Seguiré con la serie porque creo que
irá mejorando cuando llegue a los libros más actuales, aunque
quizás me salte alguno.