Una novela juvenil muy entretenida en
la que conoceremos a Hadley Sullivan, una chica americana de
diecisiete años que se enfrenta a multitud de dudas cuando de debe
viajar a Londres para asistir a la nueva boda de su padre y conocer a
su madrastra.
En el avión comparte asiento con
Oliver, un chico inglés estudiante de la Universidad de Yale, con el
que tiene un conexión inmediata. Siete horas de avión para
conocerse, hablar de cualquier cosa, abrirse el uno al otro...
conversaciones y comentarios llenos de chispa e ingenio que te sacan
la sonrisa.
Veinticuatro horas que cambiarán sus
vidas.
A pesar del título, el libro no es
estrictamente romántico sino que también se centra, con bastante
detalle, en la relación de Hadley con su padre, en las consecuencias
que un divorcio tiene en un adolescente y en la redención del
perdón.