Un libro muy triste, donde los padres, amiga de la infancia y ex marido esperan la muerte de María José, en coma irreversible por un accidente de tráfico.
Estar acompañándola durante estos duros momentos harán que piensen en sus vidas (la que esperaban vivir y la que han vivido), sus anhelos, sus frustraciones, su conformismo...
La historia al principio se hace bastante dura porque todo es trágico, nadie es feliz con lo que tiene y todos piensan que lo que dejaron atrás era mucho mejor que su vida actual.
Al final se ve un indicio de esperanza en la vida de los protagonistas (Paco, el padre; Pilar, la madre; Joaquín, el ex marido; Marga, la amiga de la infancia; Cleopatra, la cuidadora; Goumba, un senegalés paciente del hospital), la cruel experiencia de ver apagarse poco a poco a un ser querido hacen que tomen decisiones para cambiar su vida, afrontando su dolor y empezando a vivir la vida de otra manera.
No creo que sea apta para todos los estados de ánimo ya que está lleno de amargura y resignación por las decisiones tomadas.
"Cree que puede resolver sola sus conflictos, que se reducen a acostumbrarse a que ha perdido... la capacidad de ilusionarse. Eso es lo que más miedo le da... [Antes] daba igual que el presente fuera malo porque siempre quedaba el consuelo de que el futuro sería mejor. Eso es lo bueno de las ilusiones. Pero ahora ya sabe que la realidad es la enemiga natural de los sueños."
