"Te deseo el sol suficiente para
iluminar tus días, la lluvia suficiente para que aprecies el sol. La
alegría suficiente para fortalecer tu alma, el dolor suficiente para
que aprecies los pequeños momentos de felicidad en la vida. Y los
encuentros suficientes... para que puedas decir adiós de vez en
cuando."
Sinopsis
La vida es una sucesión de encuentros,
como las perlas en un collar. Conocemos y amamos, nos separamos y nos
reunimos, compartimos las alegrías y las derrotas, y nos rompen el
corazón.
Doris, de 96 años, ha tenido la misma
agenda desde 1928. Ese librito rojo contiene su propio collar de
perlas, las personas a las que ha conocido y querido a lo largo de su
vida. Ahora Doris vive sola en un apartamento del centro de
Estocolmo. Muchos de los nombres de su agenda aparecen tachados,
eliminados del mundo, y sus únicas visitas son las del servicio de
atención a la tercera edad. Su principal fuente de alegría son las
llamadas de su sobrina nieta, Jenny, que vive al otro lado del
Atlántico. Un día Doris empieza a escribir la historia de cómo
conoció a las personas que dieron forma a su vida, para que Jenny,
que será la única que la recuerde, pueda compartir su posesión más
valiosa: sus recuerdos.
Opinión
Me ha gustado mucho y me ha hecho
llorar bastante.
Es una historia muy triste en la que
conocemos la vida de Doris Alm quien desde los 13 años se vio
obligada a salir de su casa y ganarse la vida.
Doris es un personaje muy interesante,
sus elecciones son reales, hay épocas en la que es más egoísta y
busca su beneficio personal, otras en las que es más generosa.
También va cambiando su situación económica, lo que le ofrece más
alternativas y seguridad.
La forma en que está escrita emociona
y nos va dando un poco de todo: amor, desencuentros, soledad,
desarraigo, pobreza...
Me ha dado mucha pena los últimos años
de la protagonista aunque, al menos, tenía el escape de sus
recuerdos y su don para la escritura.
El final muy bonito y tierno.